La luciérnaga (Lampyris noctiluca) del género Lampyris; es un animal invertebrado que es conocido por emitir una luz brillante de color verde/amarillo en el extremo de su cola.

Luciérnaga
Luciérnaga vista de cerca

Especies

Pertenece a la familia de los lampíridos (Lampyridae) donde también se encuentran otros insectos como: bichos de luz, curucusíes​, isondúes, ​ cucuyos y gusanos de luz. Se caracterizan por la capacitad de emitir luz (bioluminiscencia).

Características

La luciérnaga es un escarabajo de carcasa dura que se cierra sobre las alas cuando no se usan. Mide entre 5 – 25 mm de longitud.

Entre sexos existe un dimorfismo sexual notable. Los machos son aladas, con élitros marrones, un pronoto más claro y una gran mancha marrón en el centro. Las hembras son larviformes, le faltan alas y a menudo poseen el doble del tamaño de los machos.

Producción de luz

La producción de luz es vital para el desarrollo de la especie. El insecto regula la producción controlando el suministro de oxigeno que va hacia las membranas emisoras que contienen luciferina. Cuando el oxigeno entra en contacto con la lucferina se produce una reacción química que produce la luz. Ésta es catalizada por la luciferasa, cuya estructura química se encuentra determinada por la génetica individual, lo que produce diferencias de luz entre individuos. Toda la energía producida es luz, sólo el 2% es calor.

Emiten luz verde amarillenta desde la parte inferior translúcida de sus últimos tres segmentos abdominales para atraer a los machos más pequeños, que tienen la capacidad de volar. Para lograrlo, emiten luz durante un par de horas para retirarse a su escondite y seguir a la noche siguiente. Seguirán haciéndolo hasta que encuentren a su pareja, pero no podrán alargar mucho más de 10 noches consecutivas.

La luz llega a ser vista por los machos hasta 45 metros de distancia. La es luz es emitada constantemente, aunque la hembra moverá el abdomen de un lado a otro lo que produce el efecto de encendido y apagado.

Las larvas pueden brillar también y son capaces de apagar su luz más rápido que las hembras, especialmente cuando se encuentran estresadas.

Comportamiento

La luciérnaga es un animal nocturno, por tanto, se encuentra activa durante la noche, que es cuando se puede apreciar sus traseros brillantes. El perído de mayor activdad se produce entre de junio y julio.

La luz es usada para atraer a sus parejas durante la época de apareamiento, aunque pueden brillar en cualquier época del año. Los machos usan la luz como indicador de fecundidad femenina, así que serán más propensos a acercarse a las hembras más brillantes, pues será más grande y pondrá un mayor número de huevos. También pueden verse atraídos por luces artificiales.

Campo lleno de luciérnagas
Campo lleno de luciérnagas

Hábitat

La luciérnaga se encuentra en pastizales de crecimiento lento, pantanos o bosques. Prefieren ambientes húmedos y climas templados, así que es posible encontrarlos cerca de ríos u otras zonas donde exista gran abundancia de agua.

Distribución

La luciérnaga se distribuye desde Portugal hasta Gran Bretaña en su parte oeste, pasando por Europa y Asia hasta el este de China. También sobrevive muy al norte, rozando el Círculo polar ártico.

No es posible encontrarla en América del norte, América del sur, sur de Asia, África, Australia y la Antártida.

Alimentación

La luciérnaga es un animal omnívoro, aunque la dieta varía según la especie. Muchas especies no comen, mientras que otras se alimentan exclusivamente de polen y néctar. En otras especies, las hembras se alimentan de otras especies de luciérnagas.

Depredadores

La luciernaga diversos depredadores debido a su tamaño y a la luz que emite. Sus depredadores son: arañas, insectos grandes, aves, reptiles y ciempiés.

Reproducción

La luciérnaga hembra, a diferencia de la mayoría de los animales, es quien inicia el apareamiento. Para la búsqueda de pareja la hembra atraerá a los machos con su luz brillante.

Una vez se han apareado, la hembra pone entre 50 – 100 huevos en zonas bastante húmedas, como tallos de hierba o debajo del musgo. Tardará unos tres días en colocar todos los huevos. Tras la puesta de huevos morirá.

Los huevos son de un tamaño diminuto, de 1 mm de diámetro. El color es de un amarillo pálido y tardan entre 3 – 6 semanas en eclosionar. Aunque este período depende del clima, cuando más cálido sea, más rápido eclosionaran los huevos.

Las larvas y hembras tienen una apariencia similar, pero las larvas tiene machas brillantes en cada uno de los 12 segmentos, mientras que la hembra carece de ello, y sólo posee un color negro.

Etapa larval

Una vez eclosionan, las larvas se convierten en animales depredadores y durante dos o tres años se alimentan de babosas y caracoles que matan inyectándoles un liquido marrón, tóxico y digestivo que es suministrado por mordiscos. Este veneno tarda un tiempo en hacer efecto, durante este tiempo la larva debe de tener cuidado para no ser atrapada por la presa, por alguna reacción defensiva.

La presa es paralizada gradualmente y e liquido digestivo va conviertiéndola en un liquido marrón que la larva podrá absorber. Durante este proceso la presa sigue viva y se han visto casos donde algunas parcialmente devoradas se arrastran después de ser comidas.

Mudan de piel entre cuatro o cinco veces en su vida. El invierno lo pasan bajo troncos, piedras, agujeros de maderas o hajarasca, hibernando conforme el alimento empieza a escasear. Cuando llega la primavera se despiertan y repiten el ciclo durante dos o tres años.

Se convierten en adultos durante los meses de mayo a julio, sobreviviendo de las reservas acumuladas durante su etapa como larvas, y muriendo después de reproducirse.

Estado de conservación

La luciérnaga se encuentra en peligro de extinción, debido a que su población disminuye drásticamente. La principal razón es la disminución de las poblaciones debido a la expansión de la civilización humana.

Es muy vulnerable a los cambios en su medio ambiente, donde incluimos destrucción del hábitat, la fragmentación del hábitat, la contaminación, la distracción de las luces artificiales, el pastoreo insuficiente y el cambio climático.

Relación con humanos

Cuenta la leyenda que los primeros humanos solían usarlas para marcar caminos y proporcionar luz a las cabañas.

Cultura popular

En el pasado diversas culturas creían que las luciérnagas tenían algún tipo de poder mágico, por lo que eran constantemente usados en los medicamentos.