Sapo común
Publicado el 16 junio, 2018 - Última modificación: 9 marzo, 2021El sapo común (Bufo bufo) o sapo europeo es un anfibio de gran tamaño localizado en Europa. Aunque no se encuentra en Islandia, ni en algunas zonas del mediterráneo. Sin embargo, también es posible encontrarlo en Siberia y en el norte de África.
Es el cuarto anfibio más común en Europa, después de la Rana comestible (Pelophylax esculentus), Rana común (Rana temporaria) y el Tritón liso (Lissotriton vulgaris)
Características
El sapo común es un animal vertebrado que puede llegar a medir unos 15 cm de longitud. Las hembras suelen ser más robustas que los machos y los espécimen del sur suelen ser más grandes que los del norte.
La cabeza es ancha con una boca debajo del hocico que tiene dos pequeñas fosas nasales y carece de dientes. Los ojos son bulbosos y protuberantes con un iris de color amarillo o cobrizo y pupilas horizontales en forma de hendidura. Justo detrás de los ojos están las glándulas paratoides posicionadas oblicuamente que contienen una sustancia nociva llamada bufotoxina que es usada por el sapo para disuadir a los depredadores.
La piel del sapo es seca y está cubierta de pequeños bultos parecidos a las verrugas y áspera. Su color es de un marrón uniforme, marrón oliva o marrón grisaseo, aunque los colores pueden variar del negro al verde y al amarillo. Periódicamente, el sapo común se desprende de su piel. Esto se elimina en pedazos andrajosos y luego se consume.
Puede llegar a vivir muchos años, en la naturaleza se cree que vive entre 10 y 12 años, mientras en cautividad han llegado a sobrevivir hasta unos 50 años. Su edad puede ser determinada contando el número de anillos de crecimiento anuales que se encuentran en los huesos de sus falanges.
Comportamiento
El sapo común es un animal salvaje que se mueve lentamente, dando saltos cortos y a diferencia de otras ranas sus patas traseras son cortas y tienen los dedos largos y desenredados.
Se trata de un animal nocturno, ya que caza de noche y se pasa el día descansando.
Hábitat
El sapo común se encuentra por toda Europa, a excepción de Islandia, las frías partes septentrionales de Escandinavia, Irlanda y varias islas del Mediterráneo (Malta, Creta, Córcega, Cerdeña y las Islas Baleares). Se extiende hasta Irkutsk en Siberia y incluyendo zona como el noroeste de África en las cordilleras septentrionales de Marruecos, Argelia y Túnez.
Es más activo en climas húmedos y se encuentra cerca de zonas cercanas al agua en áreas boscosas como bosques de coníferas, caducifolios y mixtos. También es posible verlo en ciénagas y praderas.
Alimentación
El sapo común se pasa el día escondido en una guarida donde su coloración le hace pasar desapercibido. Sale al atardecer y suele caminar bastante por la oscuridad cuando caza. Es un animal carnívoro voraz y su dieta se basa principalmente en invertebrados como insectos, gusanos, arañas, cochinillas, babosas, escarabajos, orugas, moscas, lombrices e incluso pequeños ratones.
A la hora de cazar las presas más pequeñas y de movimientos rápidos son cazadas con su larga y pegajosa lengua, mientras que las presas más grandes son agarrados con sus mandíbulas. Al no poseer dientes, las presas son tragadas enteras.
Depredadores
Por su tamaño, el sapo común tiene numerosos depredadores como serpientes de pasto, erizos, zorros, gatos domésticos y pájaros.
El sapo ha desarrollado una medida para ahuyentar a sus depredadores que consiste en inflarse, poniéndose de pie con sus cuartos traseros levantados y la cabeza baja para segregar una toxina que produce mal sabor. Se conoce que al serpiente de pasto no es afectada por esta toxina y aves como los cuervos perforan la piel con su pico, para después picotear su hígado y así evitar su toxina.
Los renacuajos también pueden exudar estás toxinas para defenderse de sus depredadores acuáticos, a excepción del tritón crestado. En esta etapa sus mayores depredadores son las larvas de libélula, escarabajos buceadores y barqueros de agua. Éste también es capaz de alimentarse del renacuajo, evitando sus toxinas, perforando la piel y succionando sus jugos.
También existe una mosca parasitaria, Lucilia bufonivora, que ataca a los sapos de una forma macabra. Pone sus huevos en la piel del sapo y cuando éstos eclosionan, las larvas se introducen por las fosas nasales del sapo y se comen su carne internamente creando consecuencias letales para el sapo.
Reproducción
El sapo común macho es un animal ovíparo que desarrolla almohadillas nupciales en sus tres primeros dedos, que los usará para agarrarse mejor a la hembra durante el apareamiento.
En primer lugar unas semanas antes llegan los machos, las hembras permanecen tiempo mínimo para aparearse y desovar. Los sapos comunes no luchan entre ellos, pero si compiten con su voz. Sin embargo, cuando hay un número excesivos de machos si luchan entre sí, incluso cuando otros machos han empezado ya a aparearse.
La hembra pone sus huevos en el agua, entre unos 3.000 y 6.000 huevos, mientras el macho los fertiliza. Los renacuajos tardarán en eclosionar unas dos o tres semanas y se alimentaran de la gelatina que los envolvían. A primera vista son similares a los renacuajos dela rana común (rana temporaria) pero de un color más oscuro. En el trascurro de unas semanas se desarrollaran las patas y perderá sus cola, a las doce semanas serán sapos en miniatura que medirán alrededor de 1,5 cm de largo. Del agua saltarán a la tierra donde pasarán el resto de su vida.
Se conoce que los adultos vuelven año tras año al mismo lugar y el 80% lo hace en el mismo lugar donde eclosionaron.
Estado de conservación
El sapo común es considerado una especie de menor preocupación. Esto se debe a que tiene una amplia distribución por casi todo Europa y no sufre pérdida de habitat ya que es muy adaptable pudiendo vivir en bosques caducifolios y de coníferas, matorrales, praderas, parques y jardines.
Las principales amenazas a las que se enfrenta son la pérdida de hábitat local, el drenaje de los humedales donde se reproduce, las actividades agrícolas, la contaminación y la mortalidad en las carreteras.
Por otra parte, la quidiomicosis es una enfermedad infecciosa de los anfibios que ha sido reportada en sapos comunes en España y el Reino Unido y puede afectar a algunas poblaciones.
Curiosidades
En el año 2007, unos investigadores inspeccionaron el Lago Ness (Escocia) mediante un submarino operado a distancia y observaron a un sapo común que se movía por el fondo del lago, a una profundidad de 325 pies (99 metros). Se sorprendieron bastante la descubrir un animal que no tuviese branquias pudiese sobrevivir en semejante lugar a esa profundidad.
La almeja europea de uña (Sphaerium corneum) puede trepar por plantas acuáticas, pero a veces se aferra al dedo del pie del sapo común. Se desconoce el por qué, pero se cree que es la forma que tiene esta almeja para desplazarse.